Un dìa voy a echar raìces aquì.
Mi vida ha estado tanto tiempo en coma que creo haberme convertido en un ser insensible, como anesteciado por defensa propia. Me parezco cada vez màs a una màquina que solo responde a la rutina de ser feliz mientras la gente de verdad crece y crea.
El mundo allà afuera se ha vuelto un extra*o. Ya no lo reconozco. Ya no me reconoce.
.. y mientras tanto el cuerpo se me atrofia y se me deshace por pura tristeza, por falta de viento y de sol.
Nunca estoy segura de la fecha, ni del dìa, ni de cuàntos a*os tengo.
Ya no escribo. Cientonoventaytres dìa que lo ùnico que consigo son frases, ideas sueltas que revolotean solas y rengas.
Descuidé el italiano. Ya no lo hablo.. Solo con mi papà, a veces, para ofrecerle un café, darle un buongiorno o contarle si mi mamà sobreviviò o no a la quimioterapia del dìa anterior.
Una vez màs, almenos, los jazmines logran florecer: son cuatro a*os que han pasado.. y yo ya no sé quién soy.